US$ 2 mil millones no serán invertidos en minería por crisis política el 2023

Informe: Paúl Caso Monzón/ Máster en periodismo económico

La compleja situación que atraviesa el país, sin soluciones a la vista, tendrá un severo impacto en el sector minero durante el próximo año 2023 con una caída de las inversiones estimada en 2 mil millones de dólares, según la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), gremio que atribuye tan adversa coyuntura a dos factores fundamentales: la inestabilidad política y social que ahuyenta a potenciales inversionistas.

Raúl Jacob, presidente de la SNMPE

El presidente del gremio, Raúl Jacob, sostuvo que el crecimiento de las inversiones mineras en los últimos años se debió a dos proyectos mineros de trascendencia nacional, como mina Justa en Ica y Quellaveco en Moquegua, pero una vez culminados y el inicio de sus operaciones se apagaron los motores de crecimiento minero y, por consiguiente, se espera una reducción de nuevos proyectos e inversiones en los próximos años.

Precisamente, el año 2021 las inversiones en minería alcanzaron los US$ 5,242 millones impulsadas por el proyecto Quellaveco de Anglo American; mientras que este año se proyectan en alrededor de US$ 5 mil millones. Con la estimación revelada por la SNMPE las inversiones mineras del año 2023 ascenderían a unos US$ 3 mil millones.

Cartera de proyectos

Esta difícil coyuntura nacional que impacta de manera negativa en el sector ocurre en circunstancias que se presentan oportunidades de generar valor con una cartera de proyectos de construcción de mina estimada en US$ 56 mil millones a través de 46 proyectos en 17 regiones; otros 62 proyectos de generación y transmisión eléctrica que demandan una inversión de US$ 8,500 millones en 22 regiones y proyectos de hidrocarburos que requieren una inversión estimada en US$ 4,700 millones.

En su intervención en la XIII Edición TICAR 2022 -Simposium de Tecnología e Innovación del Sector Minero-Energético que organizó la SNMPE-, Raúl Jacob recordó que desde el 2016, año en que se inició el periodo de inestabilidad política en el país, se viene agravando el clima de inversiones con impacto directo en un mayor crecimiento de la economía peruana.  Esta crisis política permanente también afecta a los sectores de hidrocarburos y eléctrico, provocando el estancamiento de las inversiones desde hace años.

De acuerdo a la SNMPE la participación del sector minero-energético peruano en la inversión privada total, entre los años 2011-2021, representa el 22% y de ese porcentaje, el 15% ha correspondido al sector minero, el 4% al sector eléctrico y 2% al sector hidrocarburos. Dicho de otro modo, de cada 100 soles que se invierte en el Perú, 22 soles proceden de la industria minero-energética.

Innovación en marcha

A pesar de tan sombrío panorama, la XIII Edición TICAR que recientemente congrego a expertos y panelistas en la sede de la SNMPE, ha demostrado que el sector minero-energético se caracteriza por su naturaleza innovadora y hoy se presenta la gran oportunidad de aplicar nuevas tecnologías para mejorar la bioseguridad, la conectividad y la ciberseguridad con herramientas sofisticadas como la analítica, inteligencia artificial, aprendizaje automático y tecnologías de la información que llevan a la práctica las industrias más avanzadas y las empresas modernas.

A la vanguardia del desarrollo tecnológico en el Perú, una operación minera ya utiliza camiones no-tripulados en sus actividades cotidianas que son manejados por vía remota; mientras que otras compañías del sector han introducido la denominada “Inteligencia artificial” en sus procesos de avanzada.

La minería del futuro

El presidente ejecutivo de la Compañía de Minas Buenaventura, Roque Benavides, tuvo a su cargo la charla magistral “La Minería del Futuro”, destacando que el nuevo reto del sector minero-energético consiste en ser más productivo a través de un mínimo consumo de energía, agua e intensidad de capital. “El enfoque de gestión está sustentado en el cuidado del medio ambiente, en promover el desarrollo social responsable y el uso de más tecnología”, enfatizó.

Ing. Roque Benavides, presidente ejecutivo de Minas Buenaventura

En su exposición resaltó que la innovación es el proceso de hacer las cosas de manera distinta y de manera disruptiva para aumentar la productividad, a través de la mejora continua del negocio, la sostenibilidad y la seguridad. “A mayor productividad, mejor reputación, ambiente laboral y captación de talento”, dijo.

Además, propuso ante el auditórium que Perú y Chile se integren de manera recíproca y efectiva para aprovechar conjuntamente la industrialización del cobre, impulsando una Zona Franca entre ambos países que concite el interés de empresas alemanas, por ejemplo, “para que vengan a producir aquí”.

Señaló que uno de los retos de la industria minera es la separación del cobre del arsénico mediante procesos de innovación en metalurgia. “Creemos en la colaboración, la inteligencia colectiva, la innovación abierta y la revolución industrial capacitando al trabajador”, puntualizó Roque Benavides, ex presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (CONFIEP).

La XIII Edición TICAR permitió el debate de temas de interés sectorial a cargo de destacados académicos en distintas disciplinas y campos del conocimiento. En el Bloque I se abordó la “Sostenibilidad: Un futuro bajo en carbono”; en el Bloque II “Ciberseguridad: Clave para la continuidad del negocio”; en el Bloque III “Organizaciones líquidas: Adaptabilidad, dinamismo y resiliencia” y en el Bloque IV “Industria 4.0: Agenda para acelerar nuestro crecimiento”.

En el evento minero participaron Pía Zevallos, gerente de Libélula; Christiam Garratt, socio de Risk Advisory de Deloitte; Eddy Morris, director de educación ejecutiva de la Universidad ESAN y Juan Gutierrez, VP del programa ejecutivo de Gartner, entre otros expositores del evento. Las palabras del cierre estuvieron a cargo de la directora ejecutiva de la SNMPE, Angela Grossheim.

“Estamos comprometidos en la reducción de los gases de efecto invernadero, en impulsar la transformación digital y la sostenibilidad de la industria minero-energética con una agenda conjunta en beneficio de los asociados”, resaltó en su intervención final.