El presidente de Cesel Ingenieros, Raúl Delgado Sayán señaló que respecto a los avances de obras del aeropuerto Jorge Chávez, que si bien las obras toman tiempo, hay que acelerarlas independientemente de una pandemia que ya está muy próxima a controlarse en este año. “Está bien que hayan empezado ya las obras del lado aire como el movimiento masivo de tierras; la torre de control de 65 metros de altura entre las 2 pistas de aterrizaje y sus edificios auxiliares que ya están en significativo avance; las calles de rodaje y las plataformas entre otras así como la segunda pista de aterrizaje de 3,480 metros que debe terminarse en mayo del 2022; todo esto, que ya está en construcción, representa una inversión de más de US$350 millones”.
“En cuanto al nuevo terminal, este constituye la gran inversión por parte del lado tierra, donde se tiene programado para el tercer trimestre del 2021 que ya este adjudicado para un final de obra el 2025”. Añadió que este tendría 60 posiciones de aviones y una inversión total – incluyendo el lado aire- de 1500 millones de dólares.
“La proyección inicial era para este terminal 35 millones de pasajeros con una finalización de obras en el 2025 y que sería el único que iba a funcionar como terminal aéreo, ya que el antiguo iba a ser destinado a una zona comercial, que formaría parte de un proyecto complementario denominado Ciudad Aeropuerto en el perímetro del aeropuerto, que incluye zonas complementarias de logística y de carga; zonas de negocios; zonas de transporte y zonas francas entre otras que serían de utilidad para el aeropuerto y la ciudad y con una inversión adicional estimada de US$ 600 millones ; sin embargo, con la pandemia el Concesionario está con la intención de replantear sus planes para enfocar el terminal como un diseño modular, donde si bien es cierto el nuevo terminal siempre será finalmente para 35 millones de pasajeros; este sería para construirse de forma modular por etapas, precisó Delgado”.
Acotó que en una primera etapa el concesionario está planteando tener 18 millones de pasajeros para el nuevo terminal (casi la mitad), y no desactivar el tráfico aéreo para el existente, de manera que este podría absorber unos 10 millones de pasajeros más, y funcionarían los dos, aunque retrasaría un poco el proyecto de la ciudad-aeropuerto.
El Ing. Delgado Sayán, quien también es miembro fundador y destacado representante del Comando Vacuna y experto en este tema, considera que este escenario descrito por el Concesionario es excesivamente conservador pesimista y probablemente planteado cuando todavía no había un conocimiento real del mercado de vacunas y cuando estas iban a estar disponibles para su aplicación masiva. Ahora la realidad es diferente porque a la fecha hay más de 160 millones de personas vacunadas en el mundo y al ritmo actual de vacunación, hacia el segundo semestre de este año la gran mayoría de los países del hemisferio norte desarrollado y muchos del hemisferio sur ya tendrán vacunados a más del 60% de su población y estarán ya en un casi probable retorno a la normalidad de operaciones. De hecho para mediados del 2022 esto ya habrá ocurrido en todos los países del mundo y se espera que con el desarrollo de las plataformas más avanzadas de vacunas, se controlarán de manera muy oportuna, con dosis de refuerzo, todas las distintas variantes del virus.
En línea con estas declaraciones Delgado Sayán mencionó que recientemente “el primer ministro británico Boris Johnson ha señalado que para junio de este año el primer mundo se activará y funcionará como antes, en la normalidad, y todo estará abierto”. Al día siguiente de su declaración el mercado aéreo de reservas de viajes para el verano Europeo triplicó la demanda de pasajes y reservas.
Asimismo, destacó: “esto es un tema pasajero y el Perú no debería quedarse atrás, porque de lo contario vamos a quedar como parias internacionales, si es que todo el mundo se vacuna y nosotros para este año tenemos atrasos en la vacunación”.
“Sí este año tenemos la vacunación, el turismo va a tener un rebote parecido al que hubo cuando ocurrió la crisis financiera hace 12 años, en donde al año siguiente todo estaba en la normalidad”, comentó.
Las obras como las descritas anteriormente son obras de un mediano y largo horizonte mirando hacia el 2025 y su ejecución no debiera alterarse por un fenómeno muy doloroso como la Pandemia, pero ya muy pronto a ser universalmente controlado. El tráfico aéreo; el turismo; las reservas hoteleras y todo aquello que es fundamental en este sector, que genera cientos de miles de puestos de trabajo – y que fue tremendamente golpeado en la Pandemia – debería estar preparado para un pronto rebote en el segundo semestre de este año, con un apoyo más decidido del Estado para soportar lo que aún queda hasta que en unos meses esta situación se revierta.