“La minería se mantiene como un importante motor de la economía nacional, creando empleo, infraestructura y promoviendo el desarrollo en el país”, afirmó la presidenta de La República, Dina Boluarte, en su discurso de inauguración del Simposio – XV Encuentro Internacional de Minería, evento emblema que realiza desde 1994 la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), tras señalar que este año las inversiones en el sector minero superarán los 5 mil millones de dólares.
“En el primer trimestre del 2024, el Perú convocó inversiones por 995 millones de dólares, un 17% más, superando el mismo periodo del año 2023. El año pasado, las inversiones mineras superaron los 4 mil millones de dólares, y este año, la meta es superar los 5 mil millones de dólares. Con ello, generaremos más puestos de trabajo, comercio y crecimiento, favoreciendo a la reactivación económica del país, sobre la cual trabajamos sin descanso”, detalló la mandataria.
En el encuentro, Boluarte manifestó que el reto del Perú es “lograr una producción de 3 millones de toneladas métricas de cobre al cierre del 2024”. Asimismo, reveló que, en el primer trimestre, se han ejecutado 75 proyectos de exploración minera en 17 regiones, con el principal objetivo de impulsar el desarrollo económico y social descentralizado. “El sector ha generado recursos para municipios y regiones por más de 2,396 millones de soles en canon, regalías, mineras y otros conceptos”, agregó.
Asimismo, reflexionó sobre el encuentro como una “oportunidad para llegar a consensos, compartir experiencias y seguir construyendo el camino hacia un sector minero más responsable y sostenible”. Además, señaló que todos los sectores deben de trabajar de manera colaborativa para garantizar que la minería se desarrolle de manera formal y responsable, “contribuyendo al bienestar de las comunidades donde operan, con responsabilidad social empresarial”.
Al finalizar su discurso, Boluarte compartió su preocupación sobre la pobreza extrema en el país, la cual ha incrementado en el 2023. “Necesitamos un país en paz. En donde la democracia aún es débil, se fortalezca, para que podamos generar, no solamente confianza jurídica, sino también política. Y que los inversionistas vean al Perú como un país que se desarrolla en democracia, paz y unidad para que sus inversiones puedan estar aseguradas y de esas inversiones, nosotros, desde el Ejecutivo, podamos generar calidad de vida y acortar la brecha de la pobreza y pobreza extrema”.